¿Cómo comenzar después de tanto
caos? ¿Cómo decir lo siento después de haberlo dicho tantas veces? Si muchos de
ustedes me mantienen alejado aun de su espacio, de su tiempo y de sus momentos,
no lo sé, tal vez la mejor manera seria quedarme callado o tan solo decirles
que finalmente he regresado. Ahora sé que no debo de pensar que no puedo, este
instante se generó gracias a un proceso de experiencias vividas que fueron, de
alguna o muchas formas marcando mi camino y aun así, no lograron que mi destino
se perdiera.
Decidí crear este proyecto
dedicado a muchos de los aquí presentes y a otros no presentes, pero es para
todos ustedes que decidieron compartir este momento en el que busco cerrar e
iniciar ciclos y experiencias y espero me acompañen en este sendero que me
parece luminoso, y es ahora que cada una de estas imágenes, de estas palabras
creadas desde lo más profundo muestran esa parte de mí que permaneció oculta de
los embates provocados por mis temores, mis debilidades y sobre todo por esa
inseguridad que parecía eterna. Por eso mismo tome la decisión de dedicar a
cada uno de ustedes un pedazo de mi alma, ustedes que permanecieron – a pesar
de mi constante necedad e indiferencia – iluminando desde el subconsciente el
sendero de salida, oscuro sendero de aprendizaje que parecía no tener fin.
Quizá muchos de ustedes no den
crédito a mis palabras y piensen negativamente, quizá ni siquiera permitan que
su indiferencia se desvanezca y algunos conserven - como siempre lo hicieron –
una sensación de amor y sobre todo de alegría al ver que finalmente retorno
aquel que parecía perdido y descubrir que a su regreso lo hizo mejorado de sí
mismo, para demostrarme que efectivamente la misión por la que mis padres, como
medio, permitieron aventurarme por este plano existencial, no sería para el
fracaso y mucho menos que había llegado a su fin.
Citando a Boris Cyrulnik “el regreso a la vida se realiza en secreto, con
el extraño placer que proporciona el sentimiento de vivir una prórroga, cuando
se sostenido por la afectividad cotidiana de las personas. Es extraña la forma
en que las cosas adquieren sentido cuando terminan… Y es entonces cuando
comienza la historia.
¿Quién soy yo para hacerse amar?
Esta pregunta funda y establece el pacto implícito que habrá de gobernar y
darle estilo al desarrollo de alguien que ha regresado. A partir de este
momento todos los días y todas las noches actuaran milagros maquinales capaces
de tejer un nuevo vinculo y así alumbrar una existencia diferente…”
Y
sin embargo
es preciso que haya canto
no puede ser únicamente un grito,
escuchad como
lloran en vuestro interior
las historias del pasado,
el terrible grano que siembran
hacen
que maduren con cada poema
las rebeldías mejoradas.
Como este fragmento de una poesía
de Aragón simplifica lo que a mí me duró realizar este homenaje al retorno y a
todos aquellos que fueron, que son y que desean ser parte de mi vida.
Gracias por existir y por haber
permitido que su alma me amara. Espero que me acompañen en esta nueva aventura
y a aquellos que prefieran mantenerme en el olvido, espero que perciban este
amor que perdurará por siempre.
Mil gracias